"Puede acercarse por favor" -dijo ella con su mirada reportera.
"Ahm, sí... ¿qué pasa?" -respondí, temiendo a que volviera a hacer alusión a mis faltas de respeto a lo largo del semestre; a las burlas constantes al "sistema de trabajo" provenientes de mi persona; a mi tonta incapacidad de resolver los "estúpidos ejercicios periodísticos" que, en principio, eran un insulto a nuestras inteligencias...
"¿Usted hace servicio becario?" -preguntó. Yo ya sabía a dónde iba, mas, con miedo, respondí parcamente que sí. "Y ¿con quién lo hace?" -continuó.
"Con... " y dije el nombre.
"¿Ella en dónde está, en qué sección?" -dijo.
"Rectoría... en ..." -respondí dócilmente.
"Bien... ¿le gustaría trabajar con nosotros el siguiente semestre, en la agencia informativa?"
Así terminamos la semana pasada. Había acabado ya la materia, y yo, con un promedio apenas satisfactorio, salía también así, medio deprimido, de la clase de periodismo mundial. Pero no podían terminar así las cosas y me llamaron. No sé aún qué signifique, pero trabajar en la agencia informativa de una universidad siempre es bueno. Confían en la pluma de un blogero, susurro ahora para mis adentros. Y luego -no tan luego sino en este mismo momento- lo escribo.
El festejo de los 40 de Damián, pasando ya a otros temas, fue un éxito. Globos rojos y amarillos, significando el espíritu catalán, adornaban la sala. Cánticos, fotos y películas rellenaron el evento: siempre contando con la tecnología de nuestro siglo y un buen cañón.
En otros asuntos, el peje sigue por ahí suelto: no hay quien lo pele; vino el sábado un buen amigo economi-aboga-político-periodista, que nos platicó sobre el nuevo proyecto de reforma judicial, que incluye los juicios orales; en unas horas presento mi examen final de Evaluación Crítica de Bases de la Información, que algunos traducen como Computación simplemente. Presento después, hoy mismo, mi trabajo final de Teorías y Exploración de la Comunicación Interpersonal -me encantan los nombres de las materias en la UDEM-. Y mañana -por último- mi final examen de Política y Economía.
Al fin salimos.
Se acercan las fiestas.
"Ahm, sí... ¿qué pasa?" -respondí, temiendo a que volviera a hacer alusión a mis faltas de respeto a lo largo del semestre; a las burlas constantes al "sistema de trabajo" provenientes de mi persona; a mi tonta incapacidad de resolver los "estúpidos ejercicios periodísticos" que, en principio, eran un insulto a nuestras inteligencias...
"¿Usted hace servicio becario?" -preguntó. Yo ya sabía a dónde iba, mas, con miedo, respondí parcamente que sí. "Y ¿con quién lo hace?" -continuó.
"Con... " y dije el nombre.
"¿Ella en dónde está, en qué sección?" -dijo.
"Rectoría... en ..." -respondí dócilmente.
"Bien... ¿le gustaría trabajar con nosotros el siguiente semestre, en la agencia informativa?"
Así terminamos la semana pasada. Había acabado ya la materia, y yo, con un promedio apenas satisfactorio, salía también así, medio deprimido, de la clase de periodismo mundial. Pero no podían terminar así las cosas y me llamaron. No sé aún qué signifique, pero trabajar en la agencia informativa de una universidad siempre es bueno. Confían en la pluma de un blogero, susurro ahora para mis adentros. Y luego -no tan luego sino en este mismo momento- lo escribo.
El festejo de los 40 de Damián, pasando ya a otros temas, fue un éxito. Globos rojos y amarillos, significando el espíritu catalán, adornaban la sala. Cánticos, fotos y películas rellenaron el evento: siempre contando con la tecnología de nuestro siglo y un buen cañón.
En otros asuntos, el peje sigue por ahí suelto: no hay quien lo pele; vino el sábado un buen amigo economi-aboga-político-periodista, que nos platicó sobre el nuevo proyecto de reforma judicial, que incluye los juicios orales; en unas horas presento mi examen final de Evaluación Crítica de Bases de la Información, que algunos traducen como Computación simplemente. Presento después, hoy mismo, mi trabajo final de Teorías y Exploración de la Comunicación Interpersonal -me encantan los nombres de las materias en la UDEM-. Y mañana -por último- mi final examen de Política y Economía.
Al fin salimos.
Se acercan las fiestas.
Oscarito:
ResponderEliminar¡Que buen tío eres!
Estuvo magnífica la "party", lo mejor fue mi cara fingida para simular que yo no sabía de ese evento.
Gracias a todo el comité de organización.
¿Fiesta romana?
ResponderEliminarfiesta pagana???
ResponderEliminarjajjajajjajajjajajjajajja si conocieran a damian sabrian que nunca diria ni party, ni oscarito....... saludos a toda la raza de monterraal
ResponderEliminarComenten con identidad
ResponderEliminaranonimo es una identidad
ResponderEliminarPues felicitame a Damián, por favor. Oye, por favor, métete a mi blog y firmame en la entrada "We´re Inn". Te presento a la banda completa con fotos de la tocada en la RUP, saludos.
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