26 enero 2009

mañana llueve en Paris

Ahí donde las montañas pierden su cuerpo, ahí donde ya no hay más vida vegetal y la tierra toma un rubio color, ahí, en el desierto estoy yo, sentado.

Y miro hacia todos lados. Y mi soledad me abruma. Ahí estoy sediento de todo pero basto de creatividad.

Tomo entonces la pluma que traigo en el bolsillo de mi chamarra y dibujo símbolos mayas de S.O.S. –aquellos que aprendí en la primaria-. Su fuego arde tan intenso, que me deja ciego por unos minutos. Pero, después de ese penetrante dolor, recupero una vista perfecta.

Ahí arrojo mis lentes, los golpeo y salto sobre ellos. De pronto todo mi cuerpo toma energías cósmicas. Y corro más veloz que un jabalí.

Ahí comienzo a percibir un miedo externo, como si un nuevo sentido despertara en mí. Y me acerco a lo que parecía una tormenta de arena. Ahí está, en medio, un pequeño niño. Sucio. Está temblando. Lo sostengo en mis brazos y lo llevo lejos, a lo que, según, era mi hogar.

Su miedo había consumido la pizca de irritación que corría por mis venas. Arribamos al lugar. Sujeto al pequeño niño, le ayudo a limpiarse.

Y descubrí que era yo mismo.

Impresionado, salí al desierto de nuevo. Y comenzó a llover.

18 enero 2009

Aún

Nos dimos cuenta que la razón nos guarda secretos y que, aún, los secretos de la razón no son tan misteriosos ni oscuros; pero tampoco claros o discretos.

Ella, la razón, nos reveló que una rosa es una rosa; que el mundo está triste; que Dios existe y que la lógica pronto perdería sentido.

Pero no le creímos. Salimos corriendo y más bien confiamos en lo que los latidos del corazón nos dictaban como en clave morse.

Esta mañana, bajo mi almohada, encontré un recado firmado por ella. Decía: "En breve, desaparecerá la ansiedad por agradar, no existirá más la necesidad de acumular bienes o fama, jamás sentirás de nuevo la urgencia por mostrar el propio valor: la razón."

Y luego miré arriba. Estaba rodeado de personas con celular en mano.

17 enero 2009

Desperté, desperté...

“Desde el valle de las lágrimas, desde Gaza bañada en su sangre, una sangre que ha sofocado la felicidad en el corazón de un millón y medio de habitantes.”

“Lo que veis en vuestras pantallas de televisión y lo que oís no es en absoluto todo el sufrimiento real por el que está pasando nuestro pueblo de Gaza. Ni la televisión ni la radio pueden transmitir en toda su amplitud lo que está pasando en nuestra tierra.”

“El asedio de Gaza es un huracán que crece por momentos hasta convertirse en un crimen contra la humanidad. El pueblo de Gaza hoy, lleva su tragedia al juicio de la conciencia de cada hombre "de buena voluntad".”

“Nuestros niños viven en un estado constante de pánico y terror, y esto les hace enfermar. Esto y la falta de alimentos, la mala alimentación, la pobreza, el frío...”

Y cuando despertó, el hombre se dio cuenta que había acabado consigo mismo.

Las citas son del padre Manuel Mussalam, párroco de una iglesia en Gaza

09 enero 2009

ache, ene y griega

Especular sobre si los juegos de azar por internet serán legales; si los mundos virtuales aumentarán o se unificarán accidentalmente con la realidad; si el formato blu-ray (o como se escriba) le ganará finalmente la batalla al dvd; si un extraño planeta atacará la tierra; si Hillary asesinará a Obama con un tenedor; o si, de pronto, nos dirán que la crisis era una broma o un nuevo atentado terrorista...

Acá eso no. Acá... mejor hablamos (hemos hablado, hemos especulado) de los viejos, de futbol o de más futbol. Acá, nuestras premoniciones van sobre albercas de pelotas, el mundo del periodismo, y hasta la muerte.

Y hoy, me dieron ganas de recordar en lugar de preconcebir; de optar por las memorias en vez de por las premoniciones. Hasta intenté cambiar por un día el título del blog, que dijera MEMORIAS, pero entonces nadie daría con la página e incluso todos los links comenzarían con fallos. Y eso, "no está cool" como dicen por ahí.

Mejor quedémonos con éste y con los mejores deseos del año, del "ache, ene y griega". Dicen que será bueno después de todo (de hecho dicen lo contrario, pero no pelen mucho a mis amigos periodistas... a veces -siempre- hablan de más). Al dos mil nueve yo lo veo lleno de oportunidades, de retos, de alternativas; lo veo lleno de golpes por delante y por detrás, pero golpes vistos desde los ojos de un masoquista. Yo pedí la paz mundial, un perro, que se acabe el calentamiento global, éxito en el trabajo y algo más.

Les deseo un año feliz y lleno de premoniciones.