Me justifico y me defiendo:
En esa enorme ciudad, 24 millones de habitantes te superan por mucho. La verdad, no pude con ellos: perdí mi acento regio; perdí mi tonalidad regia; pero nunca perdí ese buen humor regio; la cultura de la carne asada; la "buena vibra" regia; el modo de ser regio; y todo eso.
Este fin de semana me di cuenta que, ahora que vivo en tierras regias de nuevo, tampoco he perdido por completo lo chilango: me quedo con la buena vida, el clima agradable, la cultura, la pasión, la poesía, un poco de filosofía, grandes amistades y mucho más "cosas" "chilangas".
A todos ustedes, amigos chilangos: muchas gracias.
He aquí un chilango reportándose, saludándote (y aburriéndose).
ResponderEliminarOscar, has sido de todos los chilangos el mejor regio que he conocido, y de todos los regios definitivamente el mejor filósofo que haya estudiado conmigo.
Te mando saludos por estafeta, te llegarán en uno o dos días.
"Saludos"
Zoon Romanticón
Pequeño chilanguillo:
ResponderEliminarCurioso fin de semana que escogiste para recordar que ya no eres del todo regio... Me explico: eso de tener que pasear por un pueblo del tamaño del tuyo con calores de 40 o más me parece motivo suficiente para voltear a ver a los viajos amigos ¿no?
Bueno, te dejo, que soy hombre ocupado y los chilangos hemos de vivir la vida corriendo...
J.A.