lo viii.... no, no lo vi!

Tiempo ha que no escribo.
Post's que terminan siendo polls no valen.
¿Qué te cuento?
Que ahora me acusan de loco. Sí. Dicen que estoy chiflado (no en el sentido regio, sino en el chilango).
Venga, ¿tú lo crees?
El acontecimiento que lleva a algunos a pensarlo es el siguiente.
Día: Miércoles 11 de octubre de 2006, 7.00am.
Estoy apenas despierto. No entiendo a quienes afirman que "al que madruga, Dios lo ayuda". A mí, nunca me ha convencido del todo tal frase. En tal situación, me decido a hacer algo de provecho: leer. Saco un libro de su repisa, lo abro cuidadosamente y ...!%#$!#$... un animal recorre velozmente la página, se desliza hacia la portada, da un pequeño brinco y ..$&#%&"#$.. desaparece; ya no lo veo. Lo miro, luego, de nuevo. Casi está en el suelo; lo aplasto con la cubierta del lirbo pero .!#%!$%. nada, no hay nada. Ningún rastro del animal. Continúo leyendo. Ahora estoy alerta, sé que el animal aparecerá de nuevo hasta no cerciorarme de su muerte. Entonces tomo otro libro del cual vuelve a salir tal insecto. Éste, más coyón, brinca a la primera y vuelve a desaparecer. Así. Del todo a la nada. De estar a no estar. No sé si se trataba del mismo, pero al menos compartían la especie y, lo que sucedió, que fue veridico, no lo pudo realizar un ser terrenal.
Terminando la experiencia, un poco sorprendido de la eventualidad, conté lo sucedido tal y como te lo escribo a ti.
La gente pensó inmediatamente en anacondas, serpientes, cucarachas y hasta sombras de fantasmas.
Era un simple mosco.
¿O no era nada?
-¡Estás loco!, ¡eso es lo que pasa!
Quizá si lo esté. Sólo quizá.
Quizá sea el café.